Sin embargo, el ozono ha emergido como una alternativa más potente y ecológica, especialmente en entornos donde se requiere una desinfección profunda sin residuos químicos nocivos.
¿Qué es la lejía y cómo actúa?
La lejía es una solución de hipoclorito de sodio (NaClO), habitualmente en concentraciones entre 3% y 6%. Es eficaz contra bacterias, virus y hongos gracias a su capacidad de oxidar las paredes celulares y desnaturalizar proteínas. Sin embargo, su acción puede verse afectada por factores como el pH, la presencia de materia orgánica y el tiempo de exposición.
¿Qué es el ozono y cómo actúa?
El ozono (O₃) es una molécula compuesta por tres átomos de oxígeno, altamente inestable y reactiva. Es uno de los oxidantes más potentes disponibles, con un potencial de oxidación de 2,07 V, comparado con los 1,36 V del cloro. Esto significa que el ozono puede destruir microorganismos más rápidamente y con menor concentración.
Comparación del poder desinfectante
A continuación, analizamos cómo se compara el ozono con los productos de limpieza del hogar más comunes:
Características | Ozono | Lejía (Hipoclorito) |
---|---|---|
Poder oxidante | Muy alto (2,07 V) | Alto (1,36 V) |
Tiempo de acción | Segundos | Minutos |
Impacto ambiental | Ecológico, se convierte en oxígeno | Contaminante si no se desechan bien |
Eficacia contra virus | Alta (incluyendo virus resistentes) | Alta, pero menor que el ozono |
Eficacia en presencia de materia orgánica | Alta | Se reduce significativamente |
Subproductos | Oxígeno | Cloraminas, trihalometanos (potencialmente tóxicos) |
Residuos | Ninguno (se convierte en oxígeno) | Residuos químicos persistentes) |
Impacto ambiental | Bajo | Medio a Alto |
Limitaciones de la lejía
Aunque es económica y de fácil acceso, la lejía tiene algunas desventajas clave:
- Puede producir gases tóxicos si se mezcla con otros productos.
- Deja residuos que requieren enjuague posterior.
- Su eficacia disminuye en presencia de materia orgánica.
- Genera compuestos secundarios potencialmente dañinos para la salud humana y el medio ambiente.
El ozono es un desinfectante más potente, rápido y limpio que la lejía. Su alta eficacia, especialmente en ambientes críticos como hospitales, laboratorios y plantas de procesamiento de alimentos, lo convierte en una opción cada vez más adoptada. Además, su uso, se va extendiendo cada vez más a todos los hogares.